La búsqueda.

Nos han informado de que es aconsejable para los estudiantes como nosotros empezar a buscar alojamiento tan pronto como sea posible; es decir, en cuanto hayamos recibido la carta de admisión de la universidad. Esta mañana hemos comenzado a investigar y hemos descubierto que tenemos muchas opciones. 

La universidad no ofrece alojamiento en el interior de campus, sin embargo si posee un amplio número de apartamentos, casas y residencias de estudiantes.

Por otro lado, existe la posibilidad de conseguir estancia con una familia. En este caso, obtendríamos como ventaja un importante ahorro en la tasa mensual de alojamiento y mantenimiento personal.

Como última opción, podremos buscar por nosotros mismos un apartamento en los alrededores de la universidad. Esto es lo que hemos hecho nosotros; vamos a elegir un piso de estudiantes situado en el numero

56 de la Avenida Sainte-Clotilde. El alojamiento nos va a suponer un coste de unas 555 coronas mensuales. El propietario del apartamento nos proporciona los siguientes teléfonos de contacto:

         +4122 328 12 03

         +4122 328 12 04

Además de nuestra estancia, tendremos que hacer frente a otro tipo de gastos económicos:

· En cuanto a comida y mantenimiento necesitaremos entre 900 y 1.500 francos, dependiendo 

de nuestros gastos personales y el nivel de vida que queramos llevar.

· La ley suiza requiere para todos los estudiantes contratar una compañía de seguros. Este 
cubrirá los gastos médicos y hospitalarios así como los gastos en medicamentos bajo receta
médica. Este seguro supondrá entre unos 100 y 300 francos según el servicio contratado.

· El permiso de residencia que estamos obligados a solicitar conllevará un gasto de 200 francos.

· Por último, tendremos que abonar 300 francos como impuesto nacional, que supondrá el compromiso por parte del estado de proporcionar un servicio de transporte y limpieza de alta calidad.

Una vez acabados los trámites, hemos decidido dar un paseo por la ciudad, que está preciosa 
en esta época. Parece que poco a poco nos hacemos un hueco aquí, esperemos que todo siga 
tan bien como ha empezado.

Esta es la Place d'Armes, situada en Ginebra Carouge.

Una calle del centro de la ciudad.

Recién llegados; primeros trámites.

Acabamos de llegar al Aeropuerto Internacional de Ginebra, y la primera impresión que tenemos es muy buena. La gente es muy amable, y nos han indicado dónde podemos encontrar una oficina de turismo. Nos hemos informado acerca de una serie de trámites que todos los estudiantes internacionales debemos realizar.

En primer lugar, tendremos que dejar constancia de nuestra llegada en la oficina cantonal de población en un plazo de 8 días. No necesitaremos un visado para entrar en Suiza, pero tendremos que solicitar a las autoridades un permiso de residencia para vivir en el país. La universidad se compromete a ayudarnos en el proceso administrativo que conlleva esta solicitud.

Las autoridades suizas deberán disponer de una serie de pruebas que acrediten que hemos reservado una plaza en la universidad y que estamos capacitados económicamente para cubrir los gastos que supondrán nuestra educación y nuestra estancia en el país. Las cartas de admisión y confirmación de registro en la universidad no serán validas para obtener el permiso de residencia.

Es importante que no olvidemos traer con nosotros:

· Nuestro pasaporte, asegurándonos de que será válido durante todo el período que tengamos pensado pasar en el país.

· Nuestro certificado final de registro en la universidad.

· Dos fotografías tamaño carnet.

· Los documentos originales y estos mismos traducidos de nuestra partida de nacimiento y nuestro certificado de haber completado satisfactoriamente la educación secundaria.

· Nuestro libro de vacunaciones.

· Nuestro currículum vitae.

· Un informe bancario que muestre los fondos suficientes para cubrir nuestros estudios, o una declaración paterna que acredite que ellos pueden hacerse cargo de nuestros gastos.

Como somos jóvenes precavidos, sólo hemos tenido que seleccionar los documentos que nos pedían para entregarlos en la comisaría de policía. Pero eso ya será mañana, porque estamos muy cansados después de todo el viaje.

Nos dirigiremos al hotel en el que nos alojaremos esta noche, y mañana comenzaremos a visitar residencias de estudiantes para comparar precios y prestaciones. En principio, la habitación doble y la individual del Nash Airport Hotel nos costarán 120 francos y 95 francos respectivamente. La mayor ventaja es que está situado a 6 minutos a pie del aeropuerto.

Por hoy ha sido suficiente, nos vamos a la cama. Gute nacht!

Comenzamos.

Las maletas están listas, creemos que no se olvida nada. El camino que empezamos ahora va a ser difícil, pero nos disponemos a ampliar nuestras fronteras hacia Centroeuropa. Mañana por la mañana un tren de media distancia nos llevará hasta la estación de tren 'María Zambrano' de la ciudad de Málaga. Aquí tomaremos un avión en el aeropuerto 'Costa del Sol'. Nuestro viaje tendrá como destino la ciudad de Ginebra, en Suiza.

Suiza es un país de 7.7 millones de habitantes, su  superficie total es de unos 41.285 km cuadrados aproximadamente, de los cuales 1.289 km están ocupados por lagos. La capital de Suiza es Berna. Suiza es famosa por su seguridad, multiculturalidad y su cálido ambiente de bienvenida. Suiza es también conocida por su larga tradición en una educación altamente cualificada. La universidad IFM está orgullosa de ser parte de ella.

Ginebra es una cuidad internacional. Cada año atrae a miles de estudiantes, turistas, empresarios profesionales y empleados internacionales de todo el mundo. A día de hoy Ginebra tiene sobre unos 400.000 habitantes. El 40% de su población procede de alrededor de 157 países diferentes.

Suiza es un lugar caro para vivir que habitualmente se compara con Londres u otras ciudades europeas. Esto tampoco es del todo cierto, pues, es verdad que se pagan un gran número de impuestos pero, por otro lado, esto se compensa con el gran número de servicios del que disponen los habitantes de dicha ciudad.  La moneda que se utiliza en suiza son los francos suizos. Un franco suizo equivale a 0,829€.

En cuanto al clima, Suiza tiene un clima templado en el sur mientras que es un poco más frío en el norte. En verano se pueden alcanzar los 30º C mientras que en invierno, se producen con regularidad precipitaciones y nevadas.

El país consta de una gran estabilidad política y económica. Además, éste tiene un gran cuidado de la ciudad referente a la limpieza y mantenimiento.

La cultura suiza es muy rica, pues posee una amplia variedad de museos para visitar, para ser exactos, existen 40 museos.

La cultura suiza está influencia por los países vecinos aunque con los años, el país ha logrado desarrollar su propia cultura independiente con algunos aspectos regionales.

En general, los suizos son conocidos por su larga tradición humanitaria, ya que Suiza fue el lugar de nacimiento del movimiento de la Cruz Roja y alberga al Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas.

Los personajes nativos de suiza más destacados de la historia son los siguientes: cabe destacar a Jean-Jacques Rousseau, el cual fue un escritor y filósofo del siglo XVIII.  Jeremias Gotthelf, Gottfried Keller y Conrad Ferdinand Meyer fueron los máximos representantes de la literatura suiza del siglo XX.

Probablemente, la creación más famosa de la literatura suiza sea Heidi, la historia de una niña huérfana que vive con su abuelo en los Alpes, uno de los libros para niños más populares en el mundo que se ha convertido en un símbolo de Suiza. Su creadora, Johanna Spyri , escribió otras obras con temas similares.

Referente a los medios de comunicación, podemos decir que  la libertad de prensa y el derecho de libre expresión están reconocidos por la constitución de Suiza. La Agencia de Noticias Suiza (SNA) transmite durante todo el día información sobre política, sociedad, economía y cultura en los tres idiomas oficiales. Suiza ha tenido el mayor número de periódicos publicados en proporción a su población y tamaño. Los periódicos más influyentes son el Tages-Anzeiger, el Neue Zürcher Zeitung (ambos en alemán) y Le Temps (en francés), pero casi cada ciudad cuenta con su periódico local.

La gastronomía de Suiza es multifacética. Mientras algunos platos como la fondue, la raclette o el rösti están presentes en todas las cocinas del país, cada región desarrolló su propia gastronomía, coincidiendo cada zona gastronómica con las distintas zonas lingüísticas. La cocina tradicional suiza usa ingredientes parecidos a los de otros países europeos, entre otros productos lácteos y quesos como el gruyer o el emmental.

Un alimento típico de Suiza es el Chocolate. El chocolate se ha fabricado en Suiza desde el siglo XVIII, pero ganó su reputación a finales del siglo XIX con la invención de técnicas más modernas, como el conchado y el templado, que ayudaron a mejorar la calidad de los productos. Además, otro de los grandes adelantos suizos en esta industria fue la invención del chocolate con leche en 1875 por Daniel Peter. A modo de curiosidad, los suizos comen más de 10 kilos de chocolate al año.  Además del chocolate, en Suiza también se produce el vino blanco.

Aunque la salud Suiza es gratuita, pues normalmente la suele subvencionar el estado, existe un coste mensual de seguro obligatorio. Una familia de cuatro personas podría llegar a gastar unos 800 francos al mes en sanidad, sin incluir el cuidado dental es decir, unos 663,75€.

Suiza posee un gran número de establecimientos dedicados al comercio. Su horario de cierre es a las 14:00. El precio de los alimentos, tanto en supermercados como en restaurantes, es elevado.

Los deportes más populares en Suiza son los de invierno, debido al territorio montañoso predominante. Es por ello, que se practica mucho el esquí, el montañismo, hockey sobre hielo, patinaje sobre hielo, ciclismo, etc. Uno de los deportistas suizos más destacados y reconocidos mundialmente es Roger Federer, quién ha conseguido grandes éxitos en el mundo del tenis.

Para adaptarse a la sociedad del país, primero de todo es necesario conocer un idioma con el que nos podamos comunicar con los demás. Los suizos son bastante reservados, pues no suelen acercase a las personas hasta que tu no has establecido contacto con ellos. Una vez que te conocen, responderán favorablemente. Para ellos, es muy importante la puntualidad y que el tiempo de espera no sea de más de cinco minutos.

La tasa de criminalidad es baja (en particular para los delitos violentos). De esta manera, es un buen lugar para las familias. La vida en Suiza, motiva a la gente a hacer algo que no puede hacer en casa: senderismo, ciclismo, deportes acuáticos, esquí, snowboard en los fines de semana.